APA en debate: vivir de los derechos de autor, un derecho humano.

Los artistas no tienen que vivir de la caridad En Paraguay se puso candente el debate del derecho de vivir de los derechos intelectuales en forma digna. En especial, artistas y compositores de diferentes índoles a diario se manifiestan y exigen la transparencia en el órgano colectivo que se encarga de la recaudación de tales fondos. La discusión se puso al rojo vivo esta semana, ante la decisión de la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual, Dinapi, órgano del Poder Ejecutivo, que suspendió por 6 meses la autorización para el funcionamiento del colectivo Autores Paraguayos Asociados, APA, y aplicó una multa de 100 salarios mínimos, por supuestas irregularidades dentro de la institución.

“Mal manejo, mala gestión administrativa y falta de gestión colectiva, son los 3 graves errores de la asociación Autores Paraguayos Asociados, APA”, advirtió Patricia Stanley, titular de la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (Dinapi), en el inicio del programa televisivo Tribuna emitido por Paraguay TV. Del debate participaron también los artistas Rolando Chaparro, decano del rock paraguayo; Walter, del grupo Flou con 15 años en el escenario; Gustavo Luque, del grupo Limón Sutil: Mario Llanes, con más de 60 años de trayectoria en el grupo Los Mensajeros del Paraguay; el poeta Teófilo Acosta e Inocencio Fernández, nieto y heredero del compositor Emiliano R. Fernández. Cabe destacar que fueron invitados los representantes del APA, pero que los mismos no respondieron a la invitación. “APA no es dueña de los derechos de autor. Los dueños de estos derechos son los artistas, y como cada artista no puede ocuparse del cobro de emisión de sus temas, deja en manos de este organismo de gestión colectiva. Sin embargo, como el trabajo de APA no es transparente, el Estado interviene para velar por el derecho del ciudadano”, dijo Stanley, quien encabeza desde el Gobierno la cruzada de depuración del APA. Por citar algunos ejemplos de cómo funciona la gestión de los derechos, la directora de Dinapi mencionó que el artista argentino León Gieco cobra 11.000 dólares americanos por año solo por la canción “Solo le pido a Dios”, mientras que una humanitaria sustenta todas sus gestiones en el mundo mediante los derechos cobrados por la canción Woman de John Lennon, y en Paraguay, los descendientes de Emiliano R Fernández no pueden cobrar por el himno paraguayo que es “Che la reina.

Gustavo Luque, de Limon Sutil, agregó “es muy triste que se tenga que llegar a una suspensión. Nosotros queremos que la Dinapi siga en APA, pero su comisión directiva está totalmente cerrada. Hace 11 años que estoy en este colectivo pero no tengo derecho a votar, lo que quiere decir que las cosas tienen que cambiar”.

Walter Cabrera, de Flou, sostuvo que “la importancia de APA es fundamental. Nosotros no podemos ir a cada boliche a reclamar nuestros derechos. El manejo está mal, no es lo que nosotros queremos. Yo no se si lo que cobro es lo justo, porque no existe la forma de demostrarme lo que me están pagando. No existe explicación”.

Rolando Chaparro, señaló que “el panorama a nivel de respuesta económica es complicado. Nosotros podríamos vivir más que bien si es que recibiéramos nuestro derecho en forma justa. Lamento la suspensión de APA porque funciona mal. Esta situación enturbia más todo. Los artistas no tenemos que vivir de la caridad, tenemos el derecho de vivir bien. El derecho de autor es un derecho humano. Pero nuestros derechos están mal administrados. Se dice que los rockeros queremos tomar APA”.

Mario Llanes, de Los mensajeros del Paraguay, indicó que “recorrimos los 5 continentes con la música paraguaya. En Sudáfrica estuvimos 20 años, 10 años en Japón, Vietman, Australia y otros países fueron nuestros escenarios. Pero solamente de Sudáfrica llegaron 18 millones de guaraníes a APA y después nunca más nada. Somos artistas que recorremos el mundo que representamos al Paraguay por el mundo, sin embargo tenemos que pedir una limosna. Yo estoy debiendo a APA. Con mis 83 años es difícil volver a salir del país por lo que necesito seguridad”.

Teófilo Acosta, poeta, dijo “para mi resulta indignante la forma en que se maneja la directiva. Estuve 30 años fuera del país, volví hace 1 año y era triste ver como el APA manejaba la situación. Necesitamos un seguro social, que podamos cobrar un poco más, que nuestra vejez sea más digna”. Inocencio Fernández, nieto de Emiliano R. Fernández comentó “deberíamos estar en paz. El 100 % de los paraguayos cree que nosotros estamos forrados de plata. En todo el país se escucha la música de mi abuelo, se repite 250.000 veces al año como mínimo pero nosotros tenemos que estar mendigando. En vez de aumentar nos disminuyen los ingresos. Accidentalmente comprobé lo que sospechábamos. Con el caso de mi abuelo se está haciendo doble planilla”. Stanley concluyó la entrevista en forma enfática “No pedimos que desaparezca APA, queremos que sea transparente y eficaz. Los autores tienen el derecho humano de vivir del arte”.